Pues sí, ya veis, me despido con una viñeta-homenaje a
Cervantes. Creo que todavía nadie le había hecho un homenaje
a este referente de la literatura belga.
Menos mal que estoy yo aquí para desfacer entuertos y hacer
homenajes a los grandes genios olvidados... Menos mal
que estoy yo aquí para subsanar olvidos imperdonables,
que si no... mal andaríamos ¿eh? ¡Malanadaríamos!
Y nada más, aquí empieza mi descanso. Necesito desconectar
un tiempecillo antes de que empiece a desvariar, y a liarme y a decir cosas
sin sentido...
Por ejemplo... ahora releeo lo que he escrito y...
uf, he dicho que Cervantes es un referente de la literatura belga,
en fin... si todo el mundo sabe que Cervantes es
un referente de la literatura austro-húngara, por dios bendito.
No sé cuándo volveré. En realidad no sé si volveré, es tan
frágil la vida, tan inhóspito el destino, tan franco-prusiano
el camino que se hace al andar... Y hay dinosaurios pisando fuerte
por las calles, y perros gigantes que ladran mucho y que además
orinan mucho por las esquinas de las ciudades... Ya digo, no sé
si sobreviviré en ese mar tempestuoso y vendavaloso lleno de
pancartas publicitarias que vuelan a toda velocidad
buscando desesperadas cabezas con
las cuales chocar...
Ya os digo: me lío y digo cosas sin sentido.
Pero bueno, hablando ya en broma: la idea que tengo
es volver a finales de agosto... o los primeros días de
septiembre, a ser posible de este mismo año.
Eso sí, quiero agradecer y por tanto agradezco a es@s fieles
comentaristas que post tras post (o en algún que otro post, que
eso también es de agradecer, claro que sí) habéis tenido la
generosidad de hacerme saber vuestras impresiones
sobre mi impresionante obra.
Sí, amig@s, la modestia... esa gran
desconocida para ese genio
desbordado que no
puedo evitar
ser...
En fin, querido público:
HASTA AQUÍ LA 3ª TEMPORADA DE
LAS COSITAS DE ACAPU
Pero antes de irme del todo... Quiero que sepan vuestras mercedes
(y vosotr@s también) que, aunque en las próximas semanas no dejaré
comentarios en ningún blog, les haré alguna que otra visita,
aunque sea muy de tarde en tarde (o me vendrá
el síndrome de abstinencia)
Jo... cómo me cuesta irme... pero
vamos, vamos a ello...
Un sonoro abrazo y un fuerte beso...
¿o era al revés?
A cuidarse ¿eh?
Y muchas gracias de antemano por vuestros comentarios.
No los responderé pero los leeré con los ojos
inflamados por la emoción.
(suena a cachondeo, pero os lo digo de verdad)
Hasta pronto :-)